Manfred Trenz, o como programar un señor shoot´em up

Llevo ya un tiempo pensando en crear entradas relacionadas con coders de c64 de los que se merecen un monumento, y no sabia por donde empezar, la verdad (hay tantos tan buenos!!!), y hoy estaba leyendo la magnifica entrada sobre R-Type que han elaborado en Old School Generation (de obligada visita diaria este blog, por cierto), y se me ha venido a la cabeza Manfred Trenz, un genio de nuestro tiempo que, aunque no haya sido muy prodigo cuantitativamente en cuanto a producciones, si que lo fue cualitativamente.

Aunque a muchos de los que lo conozcamos se nos venga a la cabeza R-Type, no fue esta su unica Joya de la Corona. Este hombre, en ocaciones acompañado de Andreas Escher, en otras de Armin Gessert, o incluso en solitario, ha creado algunos de los arcades mas recordados para c64 que se puedan poner sobre la mesa.

Great Giana Sisters

Curiosamente su primer trabajo completo (bueno, completo no, este juego lo programo junto a Armin Gessert) no fue un matamarcianos, sino un plataformero. Seguramente uno de los plataformeros mas rimbombantes que se recuerden, y no por su calidad (extraordinaria, todo hay que decirlo) sino por el revuelo que monto en su momento. Hablamos, como no, del Great Giana Sisters. Este juego fue sin duda un autentico juegazo, adictivo a rabiar, y tecnicamente muy bueno.

Pero lo que ha dejado este juego para la historia fue la denuncia de Nintendo a Raimbow Arts por considerar el juego un plagio de Super Mario Bros. De hecho, aunque el juego llego a salir a la venta, Rainbow Arts se vio obligada a retirar el juego del mercado. Yo recuerdo haberlo visto aqui en España anunciado, e incluso en algunos stands de El Corte Ingles, pero en pocos meses, se hizo imposible encontrarlo en cualquier tienda. Una pena.

Katakis / Denaris

Su segundo trabajo, Katakis (llamado Denaris en Inglaterra, no me pregunteis el motivo, porque no lo se!!), fue su primer matamarcianos de una serie que sera recordada para siempre. Tecnicamente conseguia superar su trabajo anterior, y, aunque dificil, era un juego sencillamente adictivo, muy adictivo. Aqui cambio a su compañero de programacion por Andreas Escher, otro genio creando obras para la panera, y, afortunadamente no fue su ultima colaboracion.

R-Type

En 1988, y de nuevo acompañado de Andreas, lanzan el producto que los lanzaria definitivamente a la leyenda: R-Type. La conversion del famoso coin-op para c64 fue, y es, un juego soberbio en la parte grafica y sonora (este ultimo apartado hay que agradecerselo al inefable Chris Huelsbeck), un producto redondo donde los haya y dificilmente superable. Aunque de tematica muy similar, por no decir igual, a Katakis, aqui dan un giro de tuerca. R-Type es un producto con un acabado practicamente perfecto, cuidado hasta el mas minimo detalle. Aunque puedan parecer dos gotas de agua, R-Type supera a su antecesor en practicamente todo, incluido su jugabilidad, con un nivel de dificultad mucho mas ajustado.

Ya en 1990, y esta vez en solitario, nos presenta un producto nuevo, y revolucionario en su tiempo. Turrican forma ya parte de la leyenda de los shoot´em up´s, y no solo para c64. Su version para Amiga y ST fue un producto de una calidad innegable, y que hizo que cualquiera que lo hubiera visto, o bien directamente en cualquiera de las 2 maquinas de 16 bits, o en cualquier revista de la epoca, suspiraba por disfrutar de este juego para su maquina. Afortunadamente commodore tuvo su version, ¡y vaya version! Esta vez el tipico "Soldado Universal" tiene que cargarse todo bicho que se mueve por la pantalla.

Turrican

A ratos a disparar sin parar, a ratos plataformero milimetrico, Turrican consiguio mezclar generos y crear un juego con una tematica que, aunque ya vista, daba mil vueltas a todo lo que se habia programado hasta entonces. Su apartado tecnico era, como en todos los trabajos de Manfred, magnifico. Un juego que lo tenia todo, graficos, sonido, adictivo, ... y como tal, no podia faltar en la juegoteca de cualquier amante de los buenos arcades.

Al año siguiente, y aprovechando el tiron que todavia estaba dando Turrican, salio a la luz Turrican 2. De nuevo acompañado de Andreas Escher, Manfred, en mi opinion, tal vez tuvo su pequeño desliz que todo grande tiene siempre alguna vez en su vida. Turrican 2 era, tecnicamente, todavia mejor que Turrican. Otro compendio de como hacer bien las cosas, pero... no se, Turrican 2 es como una extension de Turrican.

Si lo habeis jugado (seguro que lo habeis hecho), habreis comprobado que es exactamente igual a su version inicial. El sprite del protagonista y de muchos de los enemigos sigue siendo el mismo, y tanto la tematica como la mision del juego sigue siendo la misma. Con esto no quiero decir que el juego no sea bueno, todo lo contrario, es otra joya, pero realmente aporta muy poco respecto a su predecesor.

Lo mas destaclable de este juego era la interseccion de niveles al mas puro estilo Turrican con otros niveles al mas puro estilo R-Type. Parecen 2 juegos en 1. Fue como mezclar estos 2 juegos con tematicas similares, pero distintas al fin y al cabo, con un resultado, a pesar de todo, muy bueno. Pero lo dicho, sigue sin aportar gran cosa.

Turrican 2

Aun asi, me sigue pareciendo un producto ESPECTACULAR, aunque poco original (claro que...¿cuantos arcades son o eran originales en 1991?), y que tampoco debe faltarle a cualquiera que disfrute machacando joysticks o teclas (segun jugueis con el original o en emulador)

En 1992 su ultima produccion para c64, al menos que se conozca, y de nuevo en solitario, fue Enforcer, una vuelta al pasado mas glorioso. Otro clon de R-Type, aunque con un aire mucho mas parecido a Katakis, que al igual que con Turrican 2, no aporta nada nuevo al mundo de los matamarcianos, pero que gracias a su buen hacer, convierte este juego en otro producto redondo donde los haya, y que tecnicamente sigue siendo, como todos sus juegos, soberbio.

Enforcer

Programado en un año en el que los equipos de 8 bits estaban ya cayendo practicamente en el olvido, en favor de las potentes maquinas de 16 bits, este juego paso con mas pena que gloria, pero que todo aquel que conociera a su programador, y sobre todo, las capacidades de los limitados 8 bits del commodore 64, supo reconocer como otro gran juego que supo exprimir la panera hasta limites insospechados.

Actualmente Manfred sigue metido en el mundo de la programacion, y de hecho, ha realizado juegos para Wii y para Nintendo DS, asi que no esta de mas que echeis un vistazo a lo que, todavia hoy, es capaz de crear este autentico genio.